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Lunes, 16 de diciembre de 2024



COLUMNISTAS


La injusticia climática: los países grandes causan la mayor parte del cambio climático y los países pequeños, como Costa Rica, reciben el grueso de los impactos

Roberto Dobles [email protected] | Lunes 02 diciembre, 2024


1. Emisiones crecientes y acumulación en la atmósfera

El crecimiento de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI) a través de los años han venido aumentando la concentración de éstos en la atmósfera, lo que acelera el cambio climático. Entre más aumente la concentración de GEI, más rápido aumentará el calentamiento global.

La evidencia científica muestra que esta creciente concentración de gases en la atmósfera está directamente relacionada con el aumento continuo de la temperatura media mundial del planeta.

Las crecientes emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de la actividad humana, y la creciente concentración de éstos en la atmósfera, actúan como una cobija que se hace cada vez más gruesa y envuelve el planeta Tierra, atrapando así el calor del sol y elevando las temperaturas.

El problema es que los gases de efecto invernadero que se emiten permanecen en la atmósfera mucho tiempo. Por ejemplo, el CO2 (dióxido de carbono), que es el principal gas de efecto invernadero, una vez agregado a la atmosfera puede permanecer en ella durante siglos.

Esto significa que el CO2, y otros gases de efecto invernadero, una vez en la atmósfera, pueden seguir afectando el clima del planeta durante muchísimos años.

La concentración actual de GEI en la atmosfera ya ha creado un clima que se ha vuelto sumamente peligroso y destructivo para la humanidad y los ecosistemas que perdurará por siglos.

La severidad del clima actual se agravará todavía más en el futuro si las emisiones de GEI continúan creciendo, las cuales siguen aumentando. Esta situación está creando impactos cada vez más fuertes y frecuentes, tales como sequías más intensas, lluvias más de gran intensidad que causan inundaciones muy destructivas, aumento permanente del nivel del mar que ya empieza a poner en peligro muchas zonas costeras donde hay ciudades y deterioro de la economía y de los ecosistemas.

La concentración de GEI y el cambio de temperatura a largo plazo dependen no solamente sólo de las emisiones actuales y de las emisiones en los años a venir, sino que también dependen de las emisiones pasadas que ya se han acumulado y que acumulan continuamente en la atmósfera.

Las emisiones continuas de GEI son esencialmente acumulativas debido a su almacenamiento creciente y a su permanencia en la atmósfera por muchísimos años.

Por sus grandes emisiones a través del tiempo, los países grandes son los que han causado y siguen causando el gravísimo problema del cambio climático y los países pobres, sin recursos para enfrentar los impactos del cambio climático, son los que han venido recibiendo, y continuarán recibiendo, los impactos más severos y caros, lo cual crea una enorme injusticia económica, social y ambiental.

2. La injusticia del cambio climático

En la COP29, el Secretario General de la Naciones Unidas, Antonio Guterres, pidió justicia climática a los países.

Una COP (Conferencia de las Partes) es la Cumbre Anual que realiza todos los años la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), donde se reúnen todos los países del mundo que conforman las Partes de la Convención.

En su discurso del 12 de noviembre del 2024 en la COP29, el Secretario General de la ONU señaló lo siguiente a los representantes de todos los países del mundo:

• La emergencia climática es una historia de injusticia evitable.

• Necesitamos justicia climática.

• Los ricos causan el problema, los pobres pagan el precio más alto.

• El tiempo no está de nuestro lado.

• Con el día más caliente y los meses más calientes registrados, es casi seguro que este año será el más caliente registrado.

• Tenemos una clase magistral sobre destrucción climática.

• Todos estos desastres climáticos, y más, están siendo potenciados por el cambio climático provocado por el hombre.

• Ahora, a menos que las emisiones bajen en picada y la adaptación se dispare, todas las economías se enfrentarán a una furia mayor.

• Debemos acelerar el desarrollo de sistemas de energía cero netos en emisiones, estableciendo hitos para llegar ahí.

• Debemos impulsar la adaptación al clima.

• Se puede y se debe garantizar que sea justo y lo suficientemente rápido como para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados Celsius.

• Les insto a centrarse en tres prioridades.

• Primero, reducir las emisiones con carácter de emergencia.

• En segundo lugar, se debe hacer más para proteger a sus habitantes de los estragos de la crisis climática.

Los más vulnerables están siendo abandonados a los extremos climáticos.

La brecha entre las necesidades de adaptación al cambio climático y la financiación podría alcanzar hasta 359 mil millones de dólares al año para el 2030.

• La tercera prioridad es el financiamiento.

Los países en vías de desarrollo que están deseosos de actuar se enfrentan a muchos obstáculos: escasa financiación pública; costo de capital altísimo; devastadores desastres climáticos; y el servicio de la deuda tradicional que absorbe los fondos.

El resultado es una adaptación denegada.

El Secretario General de la ONU también se refirió a la injusticia climática a nivel de las personas señalando lo siguiente:

• Un estudio de Oxfam descubrió que los multimillonarios más ricos emiten más carbono en una hora y media que la persona promedio en toda su vida.

Esta injusticia se da porque los que más sufren de los impactos del cambio climático (inundaciones, sequías, salud, costos, etc.) son los países que menos emiten gases de efecto invernadero y los más pobres.

La adaptación de un país al nuevo entorno climático que ha venido emergiendo, y que continuará deteriorándose, se refiere a un amplio abanico de acciones que ayudan a reducir la vulnerabilidad que se tiene a los impactos crecientes del cambio climático.

3. Principales países responsables del cambio climático que han creado y continúan creando inequidad

En la primera sección indiqué que los países grandes son los que han causado y siguen causando el serio y devastador problema del cambio climático debido a sus grandes y continuas emisiones a través de los años.

3.1 Principales países emiten actualmente la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero

Los diez principales países que tienen las mayores emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), como porcentaje de las emisiones globales, son los siguientes:

• China: 30,1%

• EE. UU.: 11,3%

• India: 7.8%

• Unión Europea: 6,1%

• Rusia: 5,0%

• Brasil: 2,5%

• Indonesia: 2,3%

• Japón: 2,0%

• Irán: 1,9%

• Arabia Saudita: 1,5%

La lista anterior de 10 países, que generan el 71,5% del PIB mundial, muestra los que más emiten gases de efecto invernadero con el 70,5% de las emisiones globales.

El resto de los países del mundo (185 países) son los que reciben el mayor impacto del cambio climático.

3.2 Principales países que han acumulado la mayor parte de las emisiones que se encuentran acumuladas en la atmósfera

Como se indicó en la primera sección, el impacto en el cambio climático global no se da solamente por las emisiones que ocurren actualmente, sino que se da también por las emisiones que se han realizado en el pasado y que se encuentran acumuladas en la atmósfera.

Un estudio titulado “Analysis: Which countries are historically responsible for climate change?”, publicado por Carbon Brief, muestra las emisiones de los 10 principales países que más han agregado y acumulado gases de efecto invernadero en la atmósfera durante el período 1850-2021:

• EE. UU.: 20,3%

• China: 11,4%

• Indonesia: 9,3%

• Rusia: 6,9%

• Brasil: 4.5%

• Alemania: 3,5%

• India: 3,4%

• Reino Unido: 3,0%

• Japón: 2,7%

• Canadá: 2,6%

Los datos de las emisiones acumuladas miden las emisiones de gases de efecto invernadero a lo largo del tiempo, sumando todas las emisiones que un país ha emitido desde que comenzaron los registros en el año 1850.

Muchos países en vías de desarrollo han destacado el hecho que existe una historia muy desigual de acumulación de emisiones de GEI, la cual ha estado relacionada con el nivel de desarrollo y de industrialización entre los países a través del tiempo, lo que hace que los llamados actuales a reducir sus emisiones sean injustos, ya que en la realidad no contemplan las desigualdades en las emisiones actuales y las ya acumuladas en la atmósfera.

4. Conclusiones

Definitivamente hay una creciente injusticia climática debido a que los países grandes y más desarrollados han venido causando, y seguirán causando hasta que se dé un verdadero cambio.

Bajo las condiciones actuales, el cambio climático continuará deteriorándose y los países más pequeños y pobres continuarán recibiendo el grueso de los impactos.

Costa Rica es uno de los muchos países que está sufriendo cada vez más la gran injusticia climática que se ha creado.

Por su pequeño tamaño, el país emite solamente el 0,02% de las emisiones globales de GEI, pero es uno de los países más vulnerables ya que se encuentra en una de las zonas geográficas del mundo más vulnerables al cambio climático.

Costa Rica contribuye de manera insignificante al cambio climático, pero es uno de los países que más es impactado por las múltiples afectaciones de este fenómeno que, en lo fundamental, ha sido creado y continúa siendo acelerado por los grandes países.

Ante esta crítica situación, el país debe necesaria y urgentemente actuar de manera decisiva para ir adaptándose al cambio climático, lo cual no ha ocurrido de manera relevante.

La adaptación al cambio climático está conformada por el conjunto de acciones que se deben tomar para ayudar al país a reducir la vulnerabilidad a los impactos actuales del cambio climático y a los mayores que se darán en el futuro, tales como los fenómenos meteorológicos extremos (sequías y lluvias extremas, etc.), los desastres naturales, el aumento del nivel del mar, la pérdida de biodiversidad o la inseguridad alimentaria e hídrica.

Muchos estudios y organizaciones internacionales han llamado la atención sobre la necesidad y la urgencia de la adaptación al cambio climático para paliar los efectos de este creciente fenómeno. Una de estas organizaciones es el PNUD (el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo).

En una publicación del 30 de enero del 2024, titulada “¿Qué es la adaptación al cambio climático y por qué es crucial?”, el PNUD señaló lo siguiente, entre muchas otras cosas:

• La adaptación por parte de los países y las comunidades es cada vez más urgente.

• Con cada fracción de grado que aumente la temperatura, los efectos del cambio climático serán más frecuentes e intensos, y la adaptación será mucho más difícil y costosa para las personas y los ecosistemas.

• La crisis es apremiante sobre todo para los países en vías de desarrollo, dado que estos ya viven los efectos del cambio climático y son especialmente vulnerables debido a múltiples factores, entre ellos, sus condiciones geográficas y climáticas, su gran dependencia de los recursos naturales y su limitada capacidad de adaptación a un clima cambiante.

• Aun en los casos alentadores en los que logremos reducir de forma significativa y pronta, las emisiones globales de gases de efecto invernadero y el cambio climático seguirán afectando a nuestro mundo durante décadas debido a la energía que ya está atrapada en el sistema.

• Eso significa que la reducción de emisiones no es más que una parte de nuestra respuesta a la crisis climática: la adaptación es necesaria para limitar los efectos y salvaguardar a las personas y la naturaleza.

A pesar de la crítica evolución del cambio climático y la severidad de sus destructivas consecuencias, el país no ha logrado implementar un plan de adaptación al cambio climático de corto, mediano y largo plazo que tenga impactos relevantes que le permitan paliar, aunque sea parcialmente, los estragos crecientes que causa el cambio climático.

En gran medida, lo anterior ocurre debido a la gran carencia de recursos que el país tiene que no le permite enfrentar el desafío de la adaptación al cambio climático, la cual cuesta miles de millones de dólares de manera continua a través del tiempo.

Entre muchas cosas, el país debe obligatoriamente reducir la creciente vulnerabilidad al cambio climático de la población, de la economía, del sector agropecuario, los recursos hídricos, de las ciudades, de la infraestructura (vial, etc.), del suministro de energía, de los ecosistemas naturales, de las especies silvestres y de la biodiversidad en general.

El problema es que no lo está haciendo de manera relevante y de acuerdo con las necesidades.

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