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“Mis limitaciones fueron mentales”

Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 28 septiembre, 2013


Siempre he luchado mucho para ganarme el arroz y los frijoles, indicó Laurens Molina, atleta nacional. Esteban Monge/La República


Laurens Molina

“Mis limitaciones fueron mentales”

Un atleta que encontró su fortaleza en lo que parecía una debilidad

“Las personas son millonarias físicas y no lo saben”


Una fuerte depresión a los 15 años lo hizo dejar el colegio y preguntarle a Dios por qué había nacido sin piernas, pero fue ese abismo el que le permitió entender que sería ejemplo para otros que pese a tener sus extremidades no luchan por sus sueños.
Laurens pudo superar su falta de aceptación personal, su condición física y la burla de otros, para convertirse en un atleta de alto nivel que lleva el nombre de Costa Rica a los podios más importantes del mundo.
Vendía rifas para recaudar fondos e ir a competir a otros países mientras trabajaba de polaco o panadero, fue esa lucha la que le permitió llamar la atención de un país que no le daba mérito a una población con capacidades especiales.

Luche por lo que quiere, muévase, no se quede esperando, explicó Laurens Molina, atleta nacional. Esteban Monge/La República

¿Qué ocasionó que no tenga piernas?
Una deformación congénita, nací sin huesos de la rodilla para abajo, al año y medio me amputaron esa parte de mi cuerpo, así que toda mi vida he estado sin esas extremidades.

¿En qué momento aparece el deporte?
A los 15 años tuve una inflamación en una de mis piernas y asistí al CENARE, ahí me enteré de que había un grupo de básquet y me interesó la actividad física, así que agarré el deporte para descubrirme como persona.

¿Fue su salvador?
Sí, sufrí una depresión muy fuerte a esa edad, no me aceptaba, recibía burlas de mis compañeros, renegué a Dios porque no tenía el espíritu fortalecido, pero no hay que preguntarse por qué sucede ese problema o esa caída sino más bien para qué.

¿Cómo financió sus primeras competencias?
Fue muy duro porque tenía que hacer rifas, mandar hasta 35 cartas para recibir apoyo de las empresas, para cubrir los gastos e ir a representar a Costa Rica.

¿Cuál fue la primera carrera?
En Los Ángeles, esa vez corrieron 100 sillas de ruedas y quedé como en el puesto 70, me di cuenta de que el nivel era muy fuerte y que debía entrenar como profesional, este año quedé en quinto lugar.

¿Por qué dejó de estudiar?
Estaba pasando una situación difícil de depresión, de falta de amigos, porque me veía diferente, trataba de aceptar mi discapacidad, eso me causó un rechazo hacia el colegio mientras estaba en sétimo. Me arrepentí, porque me hubiera gustado pasar la secundaria.

¿Sufrió de bullying como estudiante?
La gente me veía diferente, pero creo que era yo quien no me aceptaba; sin embargo, era difícil recibir burlas y groserías de parte de los adolescentes que sin pensar me decían cosas que me causaban daño.

¿Pensó en renunciar a su sueño?
Sí, porque era muy duro trabajar y entrenar, conseguir los recursos para viajar, pero gracias a la insistencia de mis padres lo logré. Recuerdo que a veces tenía que levantarme a las 4 a.m. a entrenar y mi papá me levantaba para que siguiera, pero cuando uno cree en algo que quiere, lo logra.

¿Qué hacía cuando no tenía plata?
En 1999 en Nueva York tuve que dormir en el aeropuerto después de competir en la maratón pues no tenía plata para pagar un hotel, esa vez quedé de sétimo lugar, muchas veces solo tenía dinero para comer una vez al día o hacer minicomidas.

¿Cuándo logró un patrocinador?
Después de años de luchar solo, hace cuatro años Bansol me permitió convertirme en atleta profesional, pues puedo dedicarme a esto al 100% y entrenar dos veces al día.

¿Trabaja como motivador?
Doy charlas en escuelas, colegios y empresas, siempre le digo a la gente es debe tener disciplina para ser exitosa, trabajar día a día.

¿Cuál es su mayor limitación?
La mental, porque yo puedo hacer muchas cosas, la gente tiene la discapacidad pero invisible, porque se rinden a la primera, porque los dejó la persona amada o tuvieron un problema en el trabajo, pero lo importante es tratar de vivir con metas y ser positivo.

¿Aún ven como tabú las diferencias físicas?
Me gusta mucho cuando los niños me dicen que tengo piernas de robot y quieren preguntar por qué, pero las mamás les dicen que no pregunten y los alejan, eso les genera un rechazo a lo que ellos ven natural, pues somos iguales.

¿Cuáles de sus logros le dan más orgullo?
La maratón popular de Madrid fue una carrera muy dura, llegué con los antebrazos sangrando, en varias partes de la competencia me quise retirar, llovía mucho y eso dificultaba subir una cuesta, así que me quité los guantes y lo logré aunque quedé lleno de ampollas. Gané el primer lugar.

¿Logró entender la razón de nacer sin piernas?
Dios permitió esto para que las personas que son millonarias físicas se den cuenta de que las limitaciones no existen, para que vean todo lo que tienen.

Angie Calvo
acalvo@larepublica.net
@La_Republica







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